Descubren pinturas y decorados en el altar mayor del templo dedicado a “Nuestra Señora de la Luz” que datan del periodo del “Porfiriato”.
Por: Alejandro Gómez Sotelo
Más de 150 exvotos con una antigüedad superior a los 140 años, manufacturados en óleo sobre madera, lámina y papel con diferentes técnicas pictóricas, acuarelas y lápices de colores, fueron encontrados en el interior del templo dedicado a “Nuestra Señora de la Luz” en la comunidad de Tecalpulco, los cuáles fueron objeto de una limpieza superficial para desmontarlos y proceder a su registro, guardado y resguardo en un lugar seguro dentro de la misma iglesia.
Además, se descubrieron vestigios y estratos de aplanado y pictóricos con un valor histórico, religioso y cultural incuantificable, que de acuerdo con investigadores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) corresponden a principios del siglo XVII, así como pinturas y decorados en el altar mayor del templo que datan del periodo del “Porfiriato”.
Según los restauradores del organismo federal, al encontrar los más de 150 exvotos se procedió a elaborar un levantamiento topográfico y efectuar el registro de datos para crear un catálogo con toda esa riqueza histórica y religiosa, con el objetivo de tener a la mano un control de ese cúmulo de ofrendas con sus características, temporalidad y estado de conservación, partiendo de su estabilización y eliminación de contaminantes.
Refirieron que ya se cuenta con un registro certero de las decenas de ofrecimientos religiosos, que en su momento fueron colocados en los muros norte y sur mientras que otros exvotos estaban guardados en bodegas, donde destacan agradecimientos del año de 1878 ubicados en óleo sobre madera y una capa de preparación, que obliga a efectuar un trabajo de concientización social para cuidar esa riqueza.
Dieron a conocer que los encargados de la limpieza de las ofrendas no podían retirarlas, porque se trata de testimonios de la fe que se tiene al templo y por ello se propuso crear un novedoso sistema de montaje donde fueran colocados los milagros, sin que ello fuera directamente sobre los aplanados y por el contrario optar por una especie de mampara, para que la comunidad religiosa pudiera observar esos ofrecimientos que tienen más de 140 años de antigüedad.
Respecto a los vestigios descubiertos en el templo, mencionaron que la mayoría de pinturas encontradas fueron al temple y con pigmentos minerales aglutinados con una proteína de origen animal característicos del siglo XVII, pero también otros colores que se comercializaban en el siglo XIX y estaban de moda en el Porfiriato, “se encontraron elementos y estratos históricos que afortunadamente no están intervenidos”.
Sin embargo, los investigadores revelaron que se ha tenido la perdida de aplanados de los estratos y aunque no pueden retirarse por su valor histórico y cultural, pero la feligresía debe cuidar las pinturas.
Advirtieron la existencia de intervenciones que generan mucho daño a las estructuras por el uso de materiales, como polímeros sintéticos que deterioran la pintura mural y aplanados originales y bajo esa premisa hicieron el llamado a proteger esos espacios que por sí solos irán contando la historia.